Ayer Lety nos dio el día entero
para recoger y limpiar nuestras celdas a fondo. A todas nos llenó de ilusión,
nos apetecía mucho, así que, nada más llegar del desayuno, nos pusimos a ello,
cada una en la suya.
Recoger, ordenar, limpiar,
cambiar esto de aquí a allá... y al fin llegué al cambio de armario. Sí, sí, ya
va haciendo más calor, así que me apetecía un montón sacar la ropa de verano y
guardar la de invierno.
Esto, que parece algo tan
sencillo, en realidad es un cambio en tu vida, un cambio que genera ilusión
ante el inicio de la nueva etapa que ya ha llegado. Cada mañana, al abrir el
armario, tienes la sensación de estar de estreno.
Y así, de la misma manera,
quiere irrumpir Cristo cada día en nuestras vidas. Él te regala salir de tu
invierno y vivir de estreno un día nuevo; de ti depende hacer el cambio o
quedarte en la etapa anterior.
Jesús llamó a salir del
invierno a Zaqueo invitándose a cenar en su casa; o a Mateo con tan sólo una
mirada; o a Pedro, diciéndole que le siguiera... y así podríamos seguir
infinitamente hasta llegar a ti.
También a ti quiere sacarte de
tu invierno, quiere hacer contigo el cambio de armario y comenzar juntos una
vida nueva. Y es que todo su deseo es verte feliz, que te sientas a gusto y con
vida.
Hoy el reto del amor es hacer
un cambio en tu vida. Hoy deja en sus manos la etapa anterior, y permítele
sugerirte un cambio. Haz un pequeño cambio que represente tu deseo de dejarte
cambiar por Él.
Y tú, ¿hoy vas de estreno?
VIVE DE CRISTO
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